¡Tanta lamboneria tenía su precio!
Sin lugar a dudas los Mayas fallaron en sus cálculos. José Gabriel se les adelantó un año; ellos pensaron que la hecatombe sucedería en el 2012, pero el ‘Rey de los Churritos’ les llegará a los manitos con 365 días de anticipación, lo cual confirma mi austera tesis:
Batraciar en Colombia es más rentable que un subsidio del AIS, más eficaz que una chuzada del DAS, tan lucrativo como una zona franca ilícita, y definitivamente menos riesgoso que una curul respaldada por el PIN.
Para obtener magno dividendo (él) no tuvo que irse al Polo, ni hacer un Cambio Radical Extremo, tampoco importó el canal desde donde emitió sus falacias, el único requisito válido, era que tuviera visa diplomática expedida previamente por un burócrata de las AUC (Algún Uribista Conocido).
Se le solicitó además, hacer propaganda tan negra -como la Candela- a la oposición, y de vez en cuando invitar a los hijos de los susodichos a su ameno programa para que el país conociera a fondo su vasto compromiso social.
Le correspondió a Rinrín entonces, exaltar los negocios de artesanías -Made In Tuchín- que contribuyeron a impulsar la economía de nuestras tribus indígenas, y desmentir paseitos en helicópteros militares, en conclusión, se le encomendó al batracio mostrar la cara positiva de los chinazos; ¡Caray!
Lo que aún no alcanzo a imaginar es qué será de las noches del viernes en la tierrita. Emitirán de nuevo El mundo al vuelo con Héctor Mora o volverá Yo sé quién sabe lo que usted no sabe, eso sí que engalanaría la franja de opinión al marcharse tan tieso y tan majo éste cachaco de agua dulce; ahora convertido por berrinches de Tontina en ‘nuestro’ embajador en México.
Tocará esperar si se pierde en la terminal aérea más concurrida del mundo, si se acostumbra al drástico cambio del Té por el Te-quila; me causa gran curiosidad saber cómo hará para bailar el pasito Duranguense, si se las arreglará para de vez en cuando andar en botas vaqueras, o si le darán indigestión las recetas culinarias del país Azteca.
Lo que sí está por verse es qué responderá cuando lo inviten a colocarse la camiseta de las Chivas o del América y no la de su Santafesito Lindo. Con semejante circo democrático quedó demostrado que los Falsos Positivos de la demagogia son una realidad en Colombia y, éste renacuajo encarna a la perfección la nueva versión Santista de ellos.
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